Análisis y opinión de expertos en economía, finanzas y negocios para los tomadores de decisiones.
Al momento de la pelea contra el Covid-19 muchas empresas se vieron obligadas a adoptar el home office de forma masiva y rápida, lo que llevó a un aumento en la popularidad de este sistema de trabajo; sin embargo, acabada la pandemia surge el debate en torno a si es una modalidad permanente o una solución temporal. Aspectos sociales, económicos y labores están sobre la mesa.
Es encomiable querer ofrecer una pensión del cien por ciento a los trabajadores de menores ingresos; el problema con la iniciativa son las fuentes de financiamiento tanto de la aportación “semilla” (cantidad y fecha de constitución), como de las fuentes de financiamiento en general.
Calidad, tiempo de entrega y precio generan confianza y relaciones a largo plazo, por lo tanto, es lo que un CFO debe considerar en torno a los proveedores para contar con flujo de efectivo y ser rentables, dos de sus encomiendas ahora que ya no solo se ocupa de la actividad financiera, sino que es un estratega en el negocio.