Análisis y opinión de expertos en economía, finanzas y negocios para los tomadores de decisiones.
Los inversionistas siguen evaluando qué tan altas deberán ser las tasas de interés en Estados Unidos para frenar la inflación sin deteriorar la dinámica económica tras el episodio de estrés bancario.
En el epicentro se encuentra la investidura presidencial de Donald Trump el 20 de enero con una mayoría republicana en las cámaras. Los activos financieros serán sensibles a los cambios en las políticas en EE. UU. pudiendo resultar en un dólar consolidándose en niveles elevados y tasas de largo plazo más altas.
Las expectativas para nuestra economía continúan su franco deterioro. La volatilidad ha alterado la estabilidad de los mercados financieros globales y el inversionista se ha retraído, afectando la liquidez en los mercados, complicando el otorgamiento de crédito en prácticamente todo el mundo.