Cuando en 2007, con apenas dos años de vida, el Indicador IMEF anticipó la recesión
económica, la incertidumbre por la que atravesaba el mundo y el escepticismo en México sobre una herramienta nueva abría un espacio de duda, que se disipó cuando efectivamente lo anunciado en el comunicado del Indicador IMEF fue contundente: “Recesión a la vista”.
Lo que siguió fue: “Se confirma la recesión”. Con ese título el boletín del Indicador IMEF del 3 de diciembre de 2008 no dejó lugar a duda y se convirtió en el espejo que más fiel y oportunamente reflejaba la realidad del comportamiento de la economía nacional. Han pasado dos décadas y sigue siendo un referente para entender el desarrollo de la economía y tomar decisiones con fundamentos.
EL ORIGEN
El Indicador IMEF surgió de la visión del economista Jonathan Heath, actualmente Subgobernador del Banco de México, quien advirtió la relevancia de la opinión de Alan Greenspan, el poderoso presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos entre 1987 y 2006, quien aseguraba que el ISM manufacuring index, era el indicador al que le ponía mayor atención.
Ante tal perspectiva, hace más de 20 años, Heath investigó y estudió este indicador que evalúa el estado de la industria estadounidense a través de encuestas a ejecutivos sobre las expectativas de producción en el futuro, nuevos pedidos, inventarios, empleo y entregas, y se dio cuenta de que no solo se podía, sino que se tenía que realizar en México.
En una entrevista publicada en la
Revista IMEF, antecedente de este News IMEF, Jonathan Heath platicó que el tema de los indicadores económicos siempre le ha fascinado, por lo que estaba muy involucrado en lo que se conoce como la familia de
los índices de difusión, que al inicio del siglo XXI no habían en México, y por ello en 2002 le propuso al entonces presidente del IMEF la idea de hacer un observatorio económico para analizar la economía y crear un comité nacional para reunir a economistas y armar la discusión sobre el rumbo de la economía. La idea que daría paso al Indicador IMEF se aprobó.
Y así fue como Lorena Domínguez como tesista y Jonathan Heath como director de tesis desarrollaron la idea. En febrero de 2003 se reunió por primera vez el Comité del Indicador para construirlo y hacerlo realidad.
El 18 de diciembre de 2003 se firmó el Convenio IMEF–INEGI, cuyo objetivo fue realizar el levantamiento, evaluar y analizar la Encuesta de Opinión Empresarial de los Ejecutivos de Finanzas, con la finalidad de construir un indicador económico de utilidad para el análisis de la coyuntura, que tuviera valor agregado y fuera complementario de los indicadores ya existentes. Y, además, que proporcionara el “Marco conceptual y metodológico del Indicador de Opinión Empresarial IMEF”. La primera encuesta se realizó en enero de 2004 con un equipo de trabajo de 17 personas.
Después de varios meses de trabajo, como parte del periodo de prueba y calibración,
en mayo de 2004 se difundió internamente para el Comité del Indicador IMEF el primer boletín
del Indicador IMEF del Entorno Empresarial Mexicano (IIEEM).
El 14 de septiembre de 2006 se realizó la presentación del IIEEM y se emitió el primer boletín que se difundió públicamente; fue el boletín No. 29 de septiembre de 2006.
A finales de 2006 ya estaba disponible al publico, se empezó a promover y funcionó muy bien, pero surgió la pregunta de qué hacer para que su difusión fuera mayor y sirviera para lo que fue creado. “Fue entonces cuando decidí visitar a Bloomberg –recuerda Jonathan Heath en la publicación referida– para pedirle que agregaran el Indicador IMEF a su plataforma. De alguna manera era el primer indicador hecho fuera del gobierno federal por un instituto privado y avalado por el INEGI”.
UNA HISTORIA QUE CONTAR: CUALIDADES CON GARANTÍA DE FIABILIDAD
El ser un indicador privado y avalado por una institución reconocida y respetada le dio mucha fortaleza al Indicador IMEF y también responsabilidades.
Jonathan Heath las relató en una anécdota:
Unos días antes de que el IMEF diera a conocer su boletín con la noticia de la recesión, el Presidente Nacional del IMEF tuvo una visita con el Secretario de Hacienda, que entre otros temas cubiertos, hablaron de lo bien que iba la marcha de la economía. Cuando el Comité decidió encabezar su boletín con la noticia de la recesión, el presidente titubeo, ya que no lo consideraba políticamente correcto contradecir al secretario inmediatamente después de una visita de cortesía.
Sin embargo, la idea central del Indicador prevaleció: anticipar cambios de rumbo en la economía, y el boletín se publicó sin censura alguna. Posteriormente el propio presidente del IMEF reconoció la importancia de proceder tal cual y asegurar la independencia de un indicador que no refleja la opinión subjetiva del Comité, sino un análisis basado en datos duros.
Posteriormente, cuando el Indicador confirmó que la recesión había llegado a su fin y que comenzaba la etapa de recuperación, hasta el propio Presidente de la República lo incluía en su discurso.
“(…) Si en ese momento no lo hubiéramos dicho, yo creo que ahí se muere [el indicador]. Tras el anuncio, todo el mundo hablaba de esto y consultaba lo que decía el IMEF.
Cuando ya estábamos saliendo de la recesión, el expresidente Calderón dijo: ‘Se terminó la recesión, así lo señala el indicador IMEF’. Hoy, hasta los medios internacionales lo refieren, un éxito bastante grande. Fueron los golpes mediáticos que hicieron que el indicador madurara y nos hemos mantenido”.
A principios de 2023 la mayoría de los analistas económicos pronosticaban una recesión. Sin embargo, el Indicador IMEF siempre dio señales de que la economía venía creciendo, por lo que el boletín de febrero de ese año se tituló “Impulso moderado”.
Con esta información el Indicador IMEF mostraba
su alto grado de confiabilidad, una de sus características
que hasta la fecha prevalecen: credibilidad, transparencia e integridad apuntaladas en cobertura, periodicidad y puntualidad, así como acceso al público y reglas específicas para dar a conocer la información en forma simultánea a todas las partes interesadas.
Este 5 de septiembre en el IMEF celebramos los primeros 20 años del Indicador IMEF, sabiendo que seguirá anticipado la dirección de la actividad manufacturera y no manufacturera en México y, a partir de la evolución esperada de esos sectores, podrá inferir la posible evolución de la economía en general en el corto plazo.